“Ya señalamos lo difícil que resulta hoy conocer e interpretar acertadamente esa realidad, dado que existe hoy una “lujuriosa vegetación” de instrumentos y problemas en economía, que recubren todo y dificultan ese conocimiento, sin mencionar el hecho trascendente que la extrema “subdivisión del hombre” por la especialización del trabajo, ha convertido en un verdadero secreto el nuevo y moderno orden de las cosas.”
G. Simmel: “La societé secréte”, 1976.
Reciente es el interés por universalizar el comportamiento económico del ser humano. Así, para intentar entender cuales son las motivaciones o las fuerzas naturales que guían a la sociedad resulta importante comprender el fenómeno económico globalmente. Respecto a esto, una nueva oportunidad se ha dado para continuar estas investigaciones: el descubrimiento de una cuidad perdida hace miles de años, que reúne condiciones nunca antes vistas por antropólogos y economistas.
Se trata de Caral, una sociedad preincaica que logró sustentarse económicamente por sí sola, convirtiéndose en un nuevo foco civilizatorio del mundo. Este desarrollo social se da en un contexto aislado de otras culturas y alejado de guerras, lo cual no ocurre en ninguno de los otros “nidos” de la civilización. Esto da una posibilidad fascinante para empezar un nuevo curso de investigación, debido a la creencia que la razón principal para el asentamiento de esta cuidad se da bajo un contexto de una mejor utilización de los recursos escasos. Por lo anterior, estudiar el nacimiento de esta ciudad puede darnos pistas tangibles sobre las verdaderas motivaciones económicas que incentivan al hombre a organizarse en torno a instituciones sociales. De gran ayuda también es el hecho de que la ciudad se encuentre intacta (a diferencia de otras civilizaciones que construyeron sobre sus antiguas edificaciones), manteniendo gran parte de su memoria cultural. Este último punto nos permite recrear el estilo de vida de los ciudadanos de Caral e intentar visualizar los cimientos económicos que dieron vida a esta ciudad.
Si bien las sociedades primitivas no constituyen entidades socioculturales homogéneas, la aplicabilidad de su estudio tiende, en un principio, a limitarse a los propios méritos de cada caso. No obstante, también podemos encontrar comportamientos parecidos dentro de una amplia gama de culturas, lo cual revalida la investigación. Es precisamente el aislamiento cultural existente en América hace más de cuatro mil años lo que permite hacer una nueva e importante comparación con los estudios de campo existentes en la actualidad, y de esta manera avanzar en la universalización de los conceptos económicos.
Aunque la teoría económica occidental ha demostrado ser una poderosa herramienta para hacer crecer los sistemas de mercado industrializados, esta no tiene aplicación sobre las comunidades primitivas debido a que no funcionan bajo sistemas de mercado ni están industrializadas. Por lo tanto, se debe comenzar por el análisis etnoeconómico con Malinowski, y no con Ricardo ni Smith. Imaginemos las posibilidades que abre este tipo de estudios, incluso podria ser factible escoger nuevas vías hacia el "desarrollo económico" que sólo entrañen los costos sociales inevitables.
Es primordial identificar adecuadamente las evidencias arqueológicas recuperadas en Caral, las cuales han permitido plantear que la población del Supe tuvo una organización social con rangos estratificados, derivados de la ubicación de trabajadores en el proceso productivo y una desigual distribución de la riqueza socialmente producida. Señalemos también que la división del trabajo hizo posible lograr un significativo avance en el conocimiento cientifico, tecnológico y artístico. Estos modos de vida giraron alrededor de asentamientos urbanos, veintiocho fechados radiocarbónicos han confirmado la antigüedad de Caral como la ciudad más antigua de Perú y de América.
Planteo que la división del trabajo y el comercio son fuerzas maximizadoras que por sí solas aseguran y permiten el agrupamiento de seres humanos en torno a sociedades “civilizadas”, también creo que es precisamente en esta etapa donde la preocupación por “lo económico” se transforma en algo determinante en la vida del hombre, lo que se puede identificar claramente al estudiar la manera en que se gesta el nacimiento de Caral. La metodología usada para demostrar esta idea, primero se basa en el estudio de la literatura existente, en especial la relacionada con la Antropología Económica, y luego continúa con el estudio de Caral, en base a los resultados que han arrojado los años de investigación en las ruinas. Finalmente, se presenta una conclusión sobre los alcances del presente trabajo y sobre las proyecciones de la Antropología Económica y su relación con la Economía Política.
Si bien las sociedades primitivas no constituyen entidades socioculturales homogéneas, la aplicabilidad de su estudio tiende, en un principio, a limitarse a los propios méritos de cada caso. No obstante, también podemos encontrar comportamientos parecidos dentro de una amplia gama de culturas, lo cual revalida la investigación. Es precisamente el aislamiento cultural existente en América hace más de cuatro mil años lo que permite hacer una nueva e importante comparación con los estudios de campo existentes en la actualidad, y de esta manera avanzar en la universalización de los conceptos económicos.
Aunque la teoría económica occidental ha demostrado ser una poderosa herramienta para hacer crecer los sistemas de mercado industrializados, esta no tiene aplicación sobre las comunidades primitivas debido a que no funcionan bajo sistemas de mercado ni están industrializadas. Por lo tanto, se debe comenzar por el análisis etnoeconómico con Malinowski, y no con Ricardo ni Smith. Imaginemos las posibilidades que abre este tipo de estudios, incluso podria ser factible escoger nuevas vías hacia el "desarrollo económico" que sólo entrañen los costos sociales inevitables.
Es primordial identificar adecuadamente las evidencias arqueológicas recuperadas en Caral, las cuales han permitido plantear que la población del Supe tuvo una organización social con rangos estratificados, derivados de la ubicación de trabajadores en el proceso productivo y una desigual distribución de la riqueza socialmente producida. Señalemos también que la división del trabajo hizo posible lograr un significativo avance en el conocimiento cientifico, tecnológico y artístico. Estos modos de vida giraron alrededor de asentamientos urbanos, veintiocho fechados radiocarbónicos han confirmado la antigüedad de Caral como la ciudad más antigua de Perú y de América.
Planteo que la división del trabajo y el comercio son fuerzas maximizadoras que por sí solas aseguran y permiten el agrupamiento de seres humanos en torno a sociedades “civilizadas”, también creo que es precisamente en esta etapa donde la preocupación por “lo económico” se transforma en algo determinante en la vida del hombre, lo que se puede identificar claramente al estudiar la manera en que se gesta el nacimiento de Caral. La metodología usada para demostrar esta idea, primero se basa en el estudio de la literatura existente, en especial la relacionada con la Antropología Económica, y luego continúa con el estudio de Caral, en base a los resultados que han arrojado los años de investigación en las ruinas. Finalmente, se presenta una conclusión sobre los alcances del presente trabajo y sobre las proyecciones de la Antropología Económica y su relación con la Economía Política.
Extracto del Trabajo de Investigación: "Influencia de la Economía en la formación de sociedades primitivas: El estudio de la ciudad de Caral" (Introducción). Por Maximiliano Orellana.
Publico la introduccion de este tema que se me ocurrió para un trabajo en la universidad. Ojalá algun día pueda llegar a conocer esas ruinas, que me dejaron soñando despierto varios días.
visiten http://www.caralperu.gob.pe para más info.
:s
